Para entender el poder curativo de los manantiales minerales, hay que tener en cuenta sus componentes individuales, los minerales.
Al igual que nosotros, los seres humanos, cada manantial curativo es muy diferente y, por lo tanto, también tiene que seleccionarse con cuidado. La frecuencia de los elementos químicos que se encuentran en ella indica si un agua puede ser útil para una determinada condición de salud o no.
A continuación, nos gustaría presentarle los elementos más comunes de los manantiales minerales junto con su influencia positiva en el organismo.
Por favor, tenga en cuenta que estos micro o grandes elementos no siempre existen en una forma independiente. A menudo pertenecen a otros elementos como el oxígeno o el cloro y están presentes en un compuesto químico.
Los minerales más comunes y sus propiedades curativas
- Azufre: el mineral del azufre o también su forma ionizada sulfato se utiliza principalmente para facilitar la digestión. El azufre ayuda a combatir el estreñimiento, estimula el hígado, la vesícula biliar y el páncreas y previene la formación de ciertos cálculos urinarios. También se atribuye al azufre un efecto positivo sobre el reumatismo y las enfermedades articulares.
- Magnesio: los tratamientos con aguas minerales que contienen magnesio se suelen prescribir para problemas de huesos o enfermedades musculares. Pero el magnesio también puede ser útil para el estrés, la fatiga y/o las migrañas.
- Calcio: al igual que el magnesio, el calcio garantiza la estabilidad de huesos y dientes. Además, contrarresta la osteoporosis.
- Sodio: se dice que el sodio tiene un efecto curativo en el reumatismo y en enfermedades de la piel como la neurodermatitis o la psoriasis. También regula el equilibrio hídrico, por lo que es adecuado para el tratamiento de los dolores de cabeza y el aumento de la actividad deportiva.
- Flúor: seguro que conoce el elemento químico flúor por el dentista. Y con razón: protege contra la caries y garantiza unos dientes fuertes.
- Potasio: el elemento del potasio se utiliza en el tratamiento de dolencias musculares. Además, se recomienda una ingesta adecuada de potasio en casos de hipertensión arterial. El riesgo de apoplejía de los pacientes disminuye de forma demostrable.
- Hierro: el elemento del hierro es conocido por su poder curativo en casos de estrés, migraña y fatiga. Pero también se utiliza para tratar alergias y enfermedades urológicas y ginecológicas.
- Radón: para dolores de espalda, reumatismo o enfermedades articulares, un tratamiento con radón debidamente dosificado puede ser una buena elección.
- Yodo: el oligoelemento natural del yodo se menciona principalmente en relación con el tratamiento de enfermedades de la tiroides. Pero también puede aliviar alergias y afecciones respiratorias.
- Manganeso: es el ingrediente secreto de la diabetes. Además, una deficiencia de manganeso está asociada con la osteoporosis.
- Boro: el poder curativo del boro aún no está tan bien investigado. Sin embargo, hay pruebas de que el boro interviene en la producción propia del organismo de estrógenos, testosterona y vitamina D. Por tanto, su medicación es principalmente para la osteoporosis, así como para dolencias ginecológicas o urológicas.
- Silicio: el silicio es indicado como remedio para problemas cutáneos como la neurodermatitis, la psoriasis o el antienvejecimiento. También puede utilizarse para el cabello o las uñas quebradizas.
- Carbono: busque aguas curativas que contengan carbono o ácido carbónico si padece dolencias digestivas, enfermedades del tracto urinario y/o de la vejiga.
- Zinc: el elemento del zinc cura los músculos, la piel, los dientes y el cabello. Además, puede ayudar con el estrés, la fatiga y la falta de concentración.
- Litio: el litio es llamado el "súper mineral" para el cerebro y el alma. En consecuencia, puede utilizarse para el estrés, el agotamiento, la fatiga y la falta de concentración.
Para más indicaciones de los minerales mencionados, consulte nuestra tabla: