En Portugal hay numerosas regiones para disfrutar de unas vacaciones perfectas sin niños. Madeira, en particular, es uno de los destinos favoritos del país. La isla es un auténtico paraíso en el Atlántico, conocido por su impresionante naturaleza, su clima suave y sus impresionantes paisajes. Madeira combina verdes montañas, pintorescas costas e idílicos jardines para crear un telón de fondo único.
Los aficionados al senderismo pueden descubrir numerosas rutas por las famosas levadas, que conducen a través de impresionantes paisajes con espectaculares vistas del valle o del océano. La exuberante vegetación y la variedad de flora y fauna hacen de cada excursión una experiencia especial.
Las regiones costeras ofrecen fantásticas vistas, escarpados acantilados y playas vírgenes que proporcionan relax y descanso.
Ya sea un paseo por los pintorescos paisajes de la isla, una excursión en barco por la costa o simplemente un día de relax junto al mar, Madeira ofrece multitud de formas de relajarse y disfrutar de la naturaleza.